28 de agosto
28 de agosto de 1990. Muere el fenómeno del rock and roll, Vince Taylor, a los 52 años.
Un día, una anécdota musical
Vince ayudó a difundir el rockabilly estadounidense en Inglaterra. Sus padres se mudaron a USA cuando era un crío y pronto se enamoró de la música de Eddie Cochran, Gene Vincent o Elvis Presley.
En su adolescencia regresó a su país ataviado con prendas de cuero, tupé erecto y esa chulería necesaria para destacar.
El tipo sobresalía entre los rockeros de la época, pero no solo en lo musical, sino en los abusos de alcohol y anfetaminas. Todo el exceso solía derivar en disturbios, disputas y demás.
Al grano, Taylor se dedicó, además de versionar temas estridentes, a sabotear su carrera y físico. Aceptaba espectáculos a los que, si le daba por ahí, no acudía.
Famosa fue la ocasión en la que, en plena gira por Alemania, Vince llamó a su novia en París y no obtuvo respuesta. Se le fue la pinza, que si me engaña, que si la cojo la la la. Y se fue a Francia, dejando a su grupo en Hamburgo justo antes del concierto y sin dar explicaciones.
Taylor la cagó definitivamente en 1965, cuando en una fiesta en el Hotel Savoy de Londres, probó por primera vez LSD (no, no me refiero a Limoncello Sin Destilar, sino a dietilamida de ácido lisérgico, la droga).
Tenía un concierto de exhibición para su cuñado, nada más y nada menos que Joe Barbera, el de Los Picapiedra, Scooby Doo o Leoncio y Tristón.
Joe se había casado con su hermana y consideraba fichar a Taylor para su nueva discográfica.
Se presentó hecho unos zorros, botella de vino Mateus en mano, anunciando que era Mateus, el nuevo Jesús, El hijo de Dios. Sacó unos billetes de su bolsillo y despotricó de como Jesús había expulsado a los prestamistas del Templo.
Para satisfacción de su banda, Vince, en vez de cantar, se fue en ambulancia, derecho al hospital. El grupo actuó, Barbera los mandó a freír espárragos y bla, bla, bla.
“Sacó un mapa del mundo y me mostró dónde tenían sus bases los extraterrestres, debajo del Ártico y en las montañas de Rusia…. El tipo era increíble… No estoy seguro de si lo mantuve como un ídolo o algo en lo que no debo convertirme”
–David Bowie.
A pesar de haber perdido la oportunidad de prosperar en Estados Unidos y haber llevado esa mala vida, Vince acabó sentando la cabeza, convirtiéndose en una gran estrella local en Francia.
Un par de curiosidades; Se llamaba Brian Maurice Holden, su apodo lo sacó de una frase en latín que leyó en un paquete de tabaco.
David Bowie se inspiró en él para crear su personaje Ziggy Stardust, protagonista de su quinto álbum de estudio.
En sus inicios, Loquillo versionó a Taylor en Cadillac, que realmente se hizo conocida cuando en los 80’s la grabaron The Clash.
Comparto video en directo de su versión del clásico de Eddie Cochran Twenty Flight Rock.
La primera actuación televisada de The Brian Setzer Orchestra fue el 27 de abril de 1994, en el Late Show With David Letterman. Tocaron Brand New Cadillac de Vince Taylor.
Rory Storm & The Hurricanes era el grupo más popular en Liverpool en 1960. Pues escuchad lo que tocaban (por cierto, el baterista, Richard Starkey, alias Ringo Starr).
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Anécdota de un 28 de agosto.
